Imaginaros ir a uno de los conciertos de Elvis Presley, imaginaros que os invita a su camerino y decide apadrinaros en la música y ser vuestro amigo. Imaginaros jugar a las cartas con el genio Chuck Berry antes de que os enseñe algunos trucos en la guitarra. Imaginaros que Johnny Cash os invita a ser su telonero en varios conciertos… Pues esta fue la vida que tuvo nuestro siguiente artista, BUDDY HOLLY.
La carrera de Buddy Holly se remonta a la época en la que crecía en su casa situada en un pueblo de Texas junto a su familia. Cuando tan solo era conocido por su nombre real, Charles Hardin Holley creció en un ambiente donde la música era un miembro más de la familia. Con ese fondo, los padres de Buddy (así era como lo llamaban cariñosamente) le enseñaron a tocar el piano, el violín, la mandolina, la guitarra y el banjo, y todo esto a los cinco años de edad. Como también se le daba muy bien cantar, comenzó a tocar en espectáculos junto a dos de sus hermanos, con los que consiguió ganar varios premios. Su faceta musical siguió creciendo durante el instituto cuando se hizo amigo de otro joven músico, Bob Montgomery, con el que formó un dúo. Ambos tocaban varios instrumentos y se dedicaron a dar modestos conciertos en fiestas locales. Continuaron creciendo y grabando varias canciones en radios y pequeños estudios de grabación (en uno de ellos escribieron el nombre de Holley sin la “e”, por lo que le quedó el nombre de Buddy Holly). Tocaban canciones que se acercaban al country y al blues, pero todo esto cambió cuando en 1955 asistieron por primera vez a un concierto de Elvis Presley y después lo conocieron en su camerino. Elvis se fijó en el gran potencial de Buddy Holly y, entre otros consejos, le condujo hacia el rock and roll. La influencia en Buddy Holly de Elvis y su amistad fue tan grande que en varias ocasiones Buddy llegó a reconocer que sin él, nunca hubiese llegado a ninguna parte.
En ese momento, Buddy volvió a su pueblo natal, y junto con antiguos amigos formó un conjunto llamado Buddy Holly & The Chirping Crickets . Con ellos grabó su primer y exitoso disco. Aunque el no lo sabía, solo le quedaban 2 años de vida, pero en ese corto espacio de tiempo, Buddy se separó de su banda y comenzó una carrera en solitario en la que se mezclaron las intensas giras con el lanzamiento de 2 discos más, con una gran cantidad de brillantes canciones, llenas de vitalidad e innovación. El final de su vida llegó cuando se encontraba en una de sus intensas y agitadas giras en 1959, en la que después de dar un concierto en Iowa, decidió alquilar un vuelo privado en una avioneta de un inexperto piloto. Aunque este no era el esquema inicial del viaje, varias circunstancias hicieron que al final se optase por la pequeña avioneta. Durante el difícil viaje por el mal tiempo y a la corta edad de 22 años de Buddy, la avioneta se precipitó a un campo de maíz, falleciendo los cuatro pasajeros del vehículo. La repercusión de su muerte fue instantánea, ya que durante días el mundo de la música se vio conmocionado por la repentina muerte de este precoz artista. Todos los grandes músicos de la época mostraron su tristeza por semejante pérdida, especialmente Elvis Presley, que se encontraba en una gira por Alemania.
En cuanto al estilo musical, Buddy Holly es uno de los grandes pioneros del Rock and Roll, y uno de los más importantes innovadores en este campo, puesto que abandonó el rockabilly dominante en aquella época y le añadió muchísima frescura, más instrumentos y una lírica más pop. Profundizó muchísimo en la rítmica de las canciones, dotándolas de muchísima más personalidad y alejándolas del repetido ritmo que estaba tomando el rock. Digamos que le dio al rock un lavado de cara. Sus canciones son tremendamente alegres y enérgicas, llenas de una gran armonía y juventud. Son ese tipo de canciones que uno quiere escuchar en una mañana soleada de primavera o verano mientras te preparas para afrontar el día… y quien dice primavera o verano dice también el otoño e invierno. En definitiva, el ambiente y la sensación del día cambia nada más escuchar la voz y la guitarra de Buddy Holly.
En cuanto a la discografía, ya sabemos que no es muy extensa, pero sí muy intensa y a la que no solo se puede escuchar una vez, puesto que la energía y la alegría que contagia hace que la disfrutes una y otra vez. Aquí va:
1- THE “CHIRPING” CRICKETS (1957): En su primer disco ya podemos intuir como va a ser la música de Buddy Holly en toda su carrera. De aquí destaco Oh Boy!, Not Fade Away, Tell Me How, Think It Over, That’ll Be The Day (la idea viene de esta misma frase que repetía John Wayne constantemente en una de sus geniales películas de vaqueros y que forma parte de mi infancia, Centauros del Desierto), Fools Paradise, I’m Looking For Someone To Love y Last Night.
2- BUDDY HOLLY (1958): En su segundo álbum, Holly mantiene la estética musical y el tono de las canciones, algo lógico teniendo en cuenta el éxito del primer disco y lo diferente que resultaba con el panorama musical de la época. De este disco destaco I’m Gonna Love You To, Peggy Sue, Look At Me, Listen To Me, Everyday, Words Of Love y Rave On.
3- THAT’LL BE THE DAY (1958): En su último disco, Buddy Holly nos deleita con canciones como You Are My One Desire, Blue Days Black Nights, Modern Don Juan, Girl On My Mind y I’m Changing All Those Changes.
4- En último lugar, también es necesario mencionar unas cuantas canciones míticas que grabó Buddy Holly en distintos formatos pero que no llegaron a publicarse en los discos, como son La Bamba, Heartbeat, Early In The Morning, It’s So Easy y True Love Ways. Seguramente muchas de ellas os suenen aunque no lo sepáis. Las hemos escuchado millones de veces durante nuestra vida.
Estas canciones las podéis encontrar, como siempre, en estas listas que os he preparado:
No podía irme de aquí sin hablar, por supuesto, de la grandísima influencia que ha tenido Buddy Holly en la historia de la música y sobretodo en la del Rock and Roll. Toda la información que he logrado recopilar haría que cualquiera ser arrodillase ante semejante figura, puesto que sus tentáculos llegan hasta nosotros aunque no nos demos cuenta. Desde un primer momento muchos músicos, como Elvis Presley, han reconocido que trabajar y tocar junto a Buddy Holly les enseñó muchas cosas y les ayudó a mejorar en su carrera. Además de eso, por si fuera poco, voy a daros algunos datos espectaculares. En primer lugar, la influencia más grande que se puede observar puede ser en The Beatles (Beatles significa “escarabajo”, que el grupo eligió, entre otras cosas, porque hacía un poco referencia a Crickets, que significa “grillos”). Si no os suena creíble, os diré que John Lennon adoraba a este artista, que George Harrison aprendió a tocar la guitarra con las canciones del primer disco de Buddy Holly, y que Paul McCartney, además de ser un gran fan, ha adquirido todos los derechos sobre las canciones de Buddy Holly (¿más pruebas?). Además de The Beatles, otros grupos de la misma época como The Kinks, The Who o The Animals han reconocido en varias entrevistas su devoción por la música de Holly. Más artistas fanáticos de él son Elvis Costello y Joe Strummer, cantante de The Clash. Otros grupos muy importantes han escrito canciones dedicadas o en las que se mención a Buddy Holly, como Blondie, Radiohead o Weezer. Además, Julian Casablancas, cantante de The Strokes, es actualmente uno de los más grandes defensores e incondicionales seguidores de la música de Buddy Holly, incluso a cantar sus canciones en directos o llamar a alguna canción como alguna de Buddy Holly.
Finalmente, os dejo un par de directos de Buddy Holly. Lo cierto es que se nota que son de los años 50 por la calidad de imagen y sonido, pero sin duda alguna no tienen ningún desperdicio verlos, porque son tremendamente divertidos y llenos de muchísima energía. Además, os dejo una sorpresita en forma de tercer video (no es Buddy Holly el que canta, sino un imitador para un documental sobre él, pero sin duda alguna acierta en cuanto a la estética y al estilo de los conciertos de Holly):
Peggy Sue, en un programa de televisión de 1957.
That’ll Be The Day, en otro programa en 1957.
Yo ya te he enseñado lo básico de BUDDY HOLLY, ahora te toca a tí escucharlo, merece la pena.
