viernes, 16 de diciembre de 2011

THE DOORS


AN AMERICAN POET…



   ... así era conocido Jim Morrison, el carismático (y tan carismático) líder de una de las bandas más importantes, influyentes e innovadoras que han existido en la historia del rock. Surgida allá en los 60, es sin duda una de las bandas que mejor encarnan la psicodelia y el misticismo que envolvía a los grandes grupos de rock de aquella época de grandes y constantes cambios sociales. Compuesto por cuatro fantásticos músicos, su espíritu creativo los llevó a lanzar históricos discos y canciones que ayudaron a cambiar la forma de hacer música. Pero sin duda alguna, lo que más destaca de esta banda es él, Jim Morrison (“El Rey Lagarto”). Poeta de nacimiento, sus capacidades musicales y su potente personalidad en los directos fue igual de grande que las excentricidades que lo rodearon durante toda su vida… y muerte. Ellos son, como no, THE DOORS.

   La historia de esta banda se remonta a Los Ángeles (EE.UU). El año era el 1964 y el lugar en el que se encontraron Jim Morrison y Ray Manzarek (antiguo compañero de Universidad) era la playa de Venice. De este inesperado encuentro surgió The Doors. Morrison le enseñó a Ray un poema que había escrito titulado “Moonlight Drive” y Ray le pidió que lo cantase. Morrison lo hizo… ¡y BUM!, Ray quedó maravillado con la voz y la expresividad de su antiguo amigo, así que no le quedó otra que pedirle que juntos comenzasen un grupo de rock, a lo cual Morrison aceptó de inmediato. Ray dejó su otro grupo para ser el teclista del nuevo, y convenció a otros dos conocidos suyos y grandes músicos para que dejasen sus grupos y se uniesen a The Doors. Ellos eran Robby Krieger (guitarra) y John Densmore (batería).

   El origen del nombre viene de la tremenda pasión que Jim Morrison profesaba por la poesía. Concretamente, eligió el nombre de un verso de un poema del escritor inglés William Blake: “If the doors of percepcion were cleansed, everything would appear to man as it is: infinite.” (Si las puertas de la percepción fueran depuradas, todo aparecería ante el hombre tal cual es: infinito).

   La banda pronto empezó a tocar en locales de la zona en conciertos hipnotizantes llenos de una espectacular fuerza y carga emotiva por parte del cantante (aunque al principio incluso cantaba de espaldas al público por una inicial fobia a los escenarios). Dieron una gran cantidad de conciertos y se hicieron bastante famosos, aunque las extravagancias de Jim no tardaron en llegar, puesto que les echaron de un local (el ‘Whiskey a Go Go’), prohibiéndoles la entrada para toda la vida porque en la canción The End, Jim Morrison gritó la siguiente frase: “Father, Yes son?,I want to kill you”, “Mother, I want to fuck you!”. Esto se consideró algo imperdonable en aquel momento, pero para la grabación del primer disco, en esta canción Morrison sustituye el “I want to fuck you” por un peculiar e intenso grito. A título personal, diré que la canción entera es brillante.

   Y entonces llegó el brillante primer álbum, y el segundo, y el tercero, y así poco a poco la fama de The Doors se expandió rápidamente como la pólvora. Hablamos de una perfección musical tremenda, con una gran cantidad de matices que dan como resultado que prácticamente todas las canciones de los discos sean éxitos. El gran logro de The Doors fue que eran la única banda estadounidense que hizo frente y una dura competencia a los grandes pilares de la música rock británica de entonces (The Beatles, The Rolling Stones, The Who,…). Y así la historia de The Doors fue avanzando poco a poco. A los éxitos del grupo se sumaban las locuras y los problemas (tanto legales como por drogas) de Jim Morrison, que hacían que las grabaciones fuesen más lentas y problemáticas. Aún así, los conciertos que daban eran épicos y muchas veces tenía que intervenir la policía, ya que a Morrison le gustaba dar al público lecciones de “moralidad”, que por aquella época no gustaba mucho a las fuerzas del orden. Y esto siguió así hasta que después de sacar el sexto álbum, Jim Morrison se retiró a París para descansar, muriendo poco después a los 27 años de edad en circunstancias tan extravagantes como la personalidad de este genio.



   En cuanto al estilo musical, The Doors destaca por no utilizar a un bajista (aunque el teclista Ray consegía tocar los ritmos que sustituirían al bajo). Lo importante de este grupo era que los 3 músicos tenían grandes estudios de música y de composición, además de que poseían una increíble habilidad para tocar sus instrumentos, lo que unido a la creatividad de Morrison para componer poemas y a su vigorosa y profunda voz, les resultaba tremendamente fácil componer canciones con infinidad de matices musicales. Su principal estilo musical es el rock psicodélico, aunque también han tocado el hard rock, acid rock o blues rock. Escuchar a este grupo es una experiencia tremenda, se vive muy intensamente cada canción. Podéis escucharlos cuando queráis o no escucharlos, pero yo sinceramente os recomiendo poneros la maldita lista que he hecho y ver que pasa... ya me contaréis que habéis sentido o experimentado (a cada persona le produce algo distinto la experiencia).

   Respecto a la discografía, han sacado un total de 9 discos de estudio, aunque solo los 6 primeros durante la vida de Jim Morrison, siendo el 7º y 8º sacados con la única participación de los 3 restantes miembros, y el último es un recopilatorio de poemas y algún directo interpretados años atrás por Jim Morrison:

1- THE DOORS (1967): Un primer disco brutal, está entre mis favoritos  casi todas las canciones son espectaculares. Destaco Break On Trough, Soul Kitchen, The Crystal Ship, Twentieth Century Fox, Alabama Song, Light My Fire, Take It As It Comes y The End.





2- STRANGE DAYS (1967): Segundo disco también brutal, se compone de muchas canciones que el grupo no incluyó en el primer disco. De aquí también son muy buenas casi todas, pero sobre todo Strange Days, You’re Little Girl, Love Me Two Times, Unhappy Girl, Moonlight Drive, People Are Strange y My Eyes Have Seen You.




3- WAITING FOR THE SUN (1968): Tercer disco, como no, brutal. De aquí destaco canciones como Hello I Love You, Love Street, Not To Touch The Earth, Wintertime Love, Spanish Caravan y We Could Be So Good Together.





4- THE SOFT PARADE (1969): Con este disco empezaron a meter sonidos típicos del blues o el jazz en sus canciones, aunque no dejan de ser igual de buenas, como Tell All The People, Touch Me, Shaman’s Blues, Do It y Wishful Sinful.







5- MORRISON HOTEL (1970): Este es uno de sus discos con más éxito. Está lleno de canciones muy potentes y llegó cuando casi todo el mundo estaba a sus pies. Se ve que no quisieron defraudar a su público, y de ahí salieron canciones como la gran Roadhouse Blues, Waiting For The Sun, You Make Me Real, Peace Frog, Blue Sunday, Queen Of The Highway y Maggie M’Gill.



6- L.A. WOMAN (1971): Este es el último álbum con Jim Morrison vivito y coleando, y aunque no es de sus mejores, si que incluye temazos como The Changeling, Love Her Madly, L.A. Woman, Crawling King Snake y Riders Of The Storm (mi gran favorita junto con The End).







   [A partir de aquí, los siguientes álbumes se publicaron con Jim Morrison ya fallecido.]

7- OTHER VOICES (1971): Aunque musicalmente sea una maravilla, yo sinceramente extraño la gran y personal voz de Morrison, por lo que solo destaco Ship W/Sails y Down On The Farm.






8- FULL CIRCLE (1972): Este es un poco más de lo mismo, así que os recomiendo escuchar Get Up And Dance, 4 Billion Souls y The Mosquito (divertida canción en castellano).






9- AN AMERICAN PRAYER (1978): Este disco sí que os lo recomiendo escuchar entero, porque es un conjunto de poemas y genialidades recitados por Jim Morrison durante la historia del grupo. Está llena de poemas, algunos directos y charlas de Jim Morrison al público. Yo incluyo unas cuantas canciones en la lista, pero os recomiendo tumbaros y escuchar el disco entero. Es una joya… Palabra.






   Estas canciones las podéis encontrar y escuchar en las siguientes listas (suscribiros, que son gratis):





   Ahora me gustaría tratar brevemente la vida y muerte de Jim Morrison. Creció viajando entre bases militares por el trabajo de su padre. Lector voraz y amante de la música y la poesía, se fue de casa a los 19 años para estudiar a la Universidad (fue compañero de Francis Ford Coppola), aunque al finalizar la carrera no fue ni a recoger el diploma porque le interesaba más la música. Ahí fue cuando se encontró a Ray Manzarek en la playa. Morrison siempre tuvo una personalidad muy filosófica, con un gran coeficiente intelectual y grandes inquietudes artísticas. Poco a poco fue adentrándose más en el chamanismo o la meditación, y sobre todo las drogas y el alcohol. Aunque fueron muchos los escándalos y excentricidades en su vida, lo del tema de las drogas siempre lo llevo ‘medianamente’ bien, puesto que Jim Morrison defendía el uso de las drogas, sobre todo las que te hacían alucinar y experimentar nuevas sensaciones, por lo que consumía mucha marihuana y LSD. Sin embargo, estaba totalmente en contra de toda clase de drogas que se inyectasen directamente en el cuerpo como la heroína (llegando incluso a darle una paliza a un camello que le vendió esta sustancia a su novia). Lo de su muerte ya es tema para un libro, puesto que hay mil teorías sobre su muerte (incluso la que defiende que aun está vivo y que todo fue una invención del cantante). Os cuento, murió a los 27 años, y el cuerpo lo encontró la novia en la bañera de su piso de París. Pero sobre su muerte se dice que fue por sobredosis, que murió en un bar y se lo llevaron al baño, que un falso médico diagnosticó su muerte, que si su padre desenterró su cadáver, y que si mil historias más… así que no os extrañéis si algún día el mismo Jim Morrison llama a la puerta de vuestra casa...

   Espero que no haya sido muy duro leer todo el reportaje, pero ahora solo tenéis que relajaros y ver los directos que os he seleccionado:

1-    Un primer video de un directo de Roadhouse Blues (1970), pero con imágenes de muchos conciertos y la locura que desataba este grupo:


2-   Touche Me, en un programa de televisión:


3-  The End, en un fantástico y hechizante directo en Canadá en 1967:



   Yo ya te he enseñado lo básico de THE DOORS, ahora te toca a tí escucharlos, merece la pena.